La conquista europea en Chile se inicia después de la fracasada aventura de Diego de Almagro que lo llevó de regreso al Perú. El retiro de esta hueste no fue interpretado por los indígenas locales como el fin de una conquista fallida, sino el principio de una gran invasión. Era cosa de tiempo que un nuevo contingente de españoles se apareciera por estas tierras para comenzar realmente el proceso de conquista.
Pedro Calvo de Barrientos
Español que participó en el apresamiento de Atahualpa, en noviembre de 1532, y que fue sorprendido robando tesoro que el Inca pagó para su rescate. Por esta acción, Francisco Pizarro a cambio de su libertad, lo hizo azotar en público y, en forma de escarmiento, le hizo cortar las orejas.
Antes de morir Atahualpa le recomendó viajar al Valle de Chile. La fecha exacta de su llegada a tierras de Aconcagua se desconoce pero se calcula que fue a comienzos de 1535.
En los años anteriores a la conquista española, Calvo de Barrientos se ganó la confianza de Michimalonco enseñándole tácticas militares europeas. Por su parte, Michimalonco vio con buenos ojos la llegada de este español ya que traía información de los acontecimientos que estaban ocurriendo en el Cuzco.
Calvo de Barrientos fracasa en persuadir a Michimalonco en la conveniencia de no oponer resistencia a los conquistadores españoles y le propone negociar la convivencia. Debido a la negativa de cacique, Barrientos se traslada a Quillota con el objetivo de convencer al gobernador Inca Quilicanta de unir sus fuerzas para enfrentar a las huestes españolas.
Diego de Almagro
Natural de la villa de Almagro en Castilla la Nueva, se embarca hacia América en 1514 a los 36 años de edad.
Almagro llegó a Chile a comienzos del mes de junio de 1536. Luego de atravesar el desierto y los valles transversales en una penosa travesía, llegó al valle Aconcagua permaneciendo por algo más de tres meses.
Al confirmar la ruda resistencia de los mapuches y la ausencia del preciado oro en el territorio, Almagro y sus hombres deciden regresar a Perú.El regreso se hizo a fines de 1536 en grupos separados. Esta partida ocasionó el desmantelamiento definitivo de la población incaizada que aún quedaba en Aconcagua.
Pedro de Valdivia
Incrementar las posesiones de la Corona española, ganar fama y prestigio, extraer el oro que creía se encontraba al sur del río Bío-Bío y alejarse de las órdenes del gobernador del Perú para depender directamente del Rey, fueron algunos de los motivos que tuvo Valdivia para conquistar y colonizar las tierras de Chile poco años después de la fallida expedición de Diego de Almagro.
Abandonó el Cuzco en 1540. Después de su salida desde el Cuzco, llega al valle de Copiapó en octubre de 1540, tomando posesión de las tierras en nombre del emperador Carlos V, denominándolas Nueva Extremadura.
Encuentro de Valdivia con la población de Aconcagua
La relación del conquistador de Chile con la población de Aconcagua fue hostil. La actitud independentista de Michimalonco y su adversidad con el gobernador Inca Quilicanta, se volcó, una vez más, contra los conquistadores españoles. Ante esta negativa de servir a la corona, Valdivia decide atacarlo en tierras del valle de Aconcagua. Michimalonco es derrotado y Valdivia recibe a cambio los lavaderos de oro ubicados en Marga-Marga.
Esta derrota no hizo más que acrecentar la hostilidad entre indígenas y conquistadores, que terminó impulsando a Michimalonco y sus hombres a caer sobre Santiago el 11 de septiembre de 1541.
Antes de finalizar aquel año de 1541, Valdivia recorre junto a sus hombres los valles de Aconcagua, Mapocho y Maipú, con el fin de desmantelar toda organización de resistencia que se estuviera gestando. En Aconcagua el objetivo se cumplió en julio de 1543.