La Sociedad durante La Colonia

Publicado: 13/03/24
Categorías:

El desarraigo de las costumbres y la pérdida de las tierras sufrido por los indígenas del Valle, por efecto del traslado a faenas mineras y agrícolas ordenado por sus encomenderos, terminó por disminuir la población, y desarmar la estructura social y cultural de éstos. Como efecto de este sometimiento debieron aceptar el nuevo régimen imperante.

Mientras esto ocurría con la población indígena, los mestizos aumentaban en número, desplazando a los indígenas en el trabajo de las haciendas y en el servicio doméstico.

La vida se desenvuelve en la Hacienda

La Hacienda es la unidad económica básica, dedicada tanto a la ganadería como a la agricultura, y es ahí donde se estructuran los sectores sociales.

Los dueños de la propiedad, tanto los europeos como la naciente oligarquía criolla (que no acceden a cargos públicos), están en la cúspide de la estructura social y desde allí se estructuran los demás sectores sociales.

Los mestizos, que han adquirido la confianza de los patrones, pasan a conformar en los límites de las propiedades, un sector a cargo del resguardo y vigilancia de ella; son los inquilinos. En las afueras, se encontraba el peonaje, mano de obra "libre", , con trabajo estacionario, en épocas de cosechas. Y los demás sectores sociales, zambos, mulatos e indígenas, diferenciados por su color de piel. Los pocos negros existentes estaban dedicados a la servidumbre doméstica.

Posteriormente la oligarquía criolla creciente establecerá sus propias villas, ocupando además, a la mano de obra que se dedicaba a vagabundear y se estaba convirtiendo en un peligro.

Fundación de villas y ciudades

El siglo XVIII sorprende a las tierras de Aconcagua con notables progresos. Es la época de mayor desarrollo agrícola y minero de la Colonia; mejoran también las vías de comunicación con el resto del territorio y con las provincias transcordilleranas; se notan considerables aumentos de las cifras del comercio.

La necesidad de fundar ciudades surge de la realidad social que se vivía en esos tiempos. El Gobernador José Antonio Manso de Velasco, funda la villa de San Felipe el Real en 1740. Tiempo después, bajo el gobierno de Ambrosio O'Higgins, se fundó la nueva villa de Santa Rosa de Los Andes en 1791.

Fundación de San Felipe

Manso de Velasco decretó el 3 de agosto de 1740 la fundación de la nueva Villa.

Siguiendo el patrón urbano hasta entonces, el cuadro de damero, se dispuso la repartición de los solares alrededor de la Plaza de Armas del mismo modo que la mayoría de las ciudades de aquella época. Lo solares al costado de la plaza se debían destinar a casa de ayuntamiento, del corregidor, cárcel e iglesia parroquial. Y los restantes para los vecinos más importantes. De este modo quedó fundada la nueva Villa, y años más tarde, en 1770, se le otorga el título de ciudad bajo el reinado de Carlos III.

Fundación de Los Andes

En octubre del año 1788, el gobernador don Ambrosio O'Higgins viajó desde Santiago hacia el norte con la intención de fundar nuevas villas para el reino.

La primera parada la hizo en la nueva ciudad de San Felipe el Real y, de allí, se decidió a visitar el Valle superior en busca del sitio donde fundar una nueva Villa.

Uno de los lugares de acogida más recurrente a principios de este siglo fue la Hacienda Santa Rosa a cargo de los Dominicos hasta el año de su retiro. Por tal motivo, y con la intención de mejorar el equipamiento de dicho lugar, se decidió que el mejor lugar para fundar la Villa de Santa Rosa de Los Andes era el de las Piedras Paradas (Miranda, 1989).

El 31 de Julio de 1791 el gobernador don Ambrosio O'Higgins redacta el edicto de fundación de la Villa Santa Rosa de Los Andes en el mismo sitio que solicitaron los vecinos, en la parte principal del Valle que dio el nombre al país.

Fundación y creación de nuevas villas y comunas

El siglo XVIII quedó clausurado a la creación de nuevas ciudades en el Valle. Sólo será el nuevo régimen de la República el que dará paso a la fundación de nuevas ciudades. Algunos autores plantean que la motivación para fundar nuevas ciudades está en el interés de controlar los procesos electorales propios del nuevo régimen. Las actuales ciudades y pueblos más importantes del valle de Aconcagua fueron fundadas durante los siglos XIX y XX. Aquí presentamos un pequeño resumen de éstas.

Putaendo con un interesante pasado indigena que data desde hace más de 5.000 años, se le otorgó el 20 de marzo de 1831 por la Asamblea de Aconcagua el título de Villa de la Unión de San Antonio de Putaendo, creándose como departamento desde aquel año.

Llay Llay tiene su origen en la propiedad de doña Josefa Vargas Ponce y la de su marido don Juan Arcaya en el siglo XVIII. Nace como comuna el 6 de abril de 1875 durante el gobierno de don Federico Errázuriz Zañartu y debe su existencia como tal a la estación de ferrocarriles y a tres hornos de fundición de cobre que allí existieron.

Santa María fue creada con el título de Villa y a su vez de comuna en el año 1895 bajo el gobierno de Jorge Montt. Carlos Ibáñez del Campo, durante su primer gobierno en 1927, le quita dicha categoría siendo restablecida por Arturo Alessandri Palma.

Catemu fue un antiguo asentamiento indígena que luego se transformó en una gran hacienda ganadera. Sin embargo, su origen está ligado a la mineria del cobre, llegando a tener 40 hornos de fundición.El 22 de diciembre de 1891, se funda oficialmente como comuna bajo el gobierno de don Jorge Montt.

Calle Larga nace como comuna el 24 de diciembre de 1891 bajo el gobierno de Jorge Montt. Su nombre se debe a la gran calle larga que unía la cuesta de Chacabuco con Los Andes en cuyos costados en forma espontánea se instalaron caseríos.

Panquehue era sólo una laguna y pantanos de la ribera del río Aconcagua donde crecía el Pangue, que es una planta de hojas grandes que crece en lugares húmedos. Desde el siglo XVII se ubicaron tres grandes haciendas: San Buenaventura, San Roque y Lo Campo. La comuna se fundó el 31 de diciembre de 1896 bajo el gobierno de don Federico Errázuriz Echaurren y su primer alcalde fue don Guillermo Rucker. 

Rinconada fue reconocida como Villa el 18 de enero de 1897 durante el gobierno de don Federico Errázuriz Echaurren gracias al desarrollo que había alcanzado en la producción agrofrutícola. Toma su nombre, debido a la situación geográfica encajonada en que se emplaza.

San Esteban fue nombrada comuna el año 1891 con el nombre de Aconcagua Arriba. Durante el gobierno de Alessandri Palma, en el año 1936, toma el nombre de San Esteban, patrono de la parroquia local.

Desarrollado por:
Financiado por:

Mi Valle
de Aconcagua

Corporación de Desarrollo Pro Aconcagua
Av. Carlos Díaz S/N, Los Andes, Chile
Fono (34) 242 5974
linkedin facebook pinterest youtube rss twitter instagram facebook-blank rss-blank linkedin-blank pinterest youtube twitter instagram